Jay Slater, el aprendiz de albañil británico del que nadie sabe desde el pasado lunes 17 de junio, ha dejado de ser buscado por la Guardia Nacional española, tras dos semanas consecutivas de búsqueda de alto perfil.
Este domingo, la policía dio a conocer que canceló la búsqueda de Jay Slater a 15 días de haber desaparecido tras ir a un festival de música electrónica en Tenerife; no obstante, el caso sigue bajo investigación, indicó un portavoz de la policía: «El operativo de búsqueda ya ha finalizado aunque el caso sigue abierto”.
Aunque la operación diaria que hacía la Guardia Nacional para localizar a Jay culminó, las autoridades indicaron estar atentas en caso que amerite una nueva búsqueda.
Warren Slater, padre de Jay, afirmó estar decepcionado por la decisión de la Guardia Nacional para buscar a su hijo, al tiempo que señaló la falta de empatía y ayuda por parte del gobierno del Reino Unido para resolver la situación, y puntualizó que el único interesado es un tiktoker británico:
«Es un poco decepcionante que no haya británicos aparte de Paul (el TikToker), pero supongo que para ellos es solo un chico británico que vino aquí y se emborrachó», señaló Warren Slater.
Agregó que el momento por el que están pasando como padres, es muy complicado, ante los detractores de la situación.
“Todavía no podemos creerlo; ha sido muy duro para nosotros y quiero que la gente piense en nosotros como padres y en lo que estamos pasando. Todos esos trollers que nos atacan, no lo hacen, sabemos cómo nos sentimos, ¿por qué no vienen aquí y echan un vistazo y comprueben por sí mismos lo peligroso que es?”, dijo el padre de Jay.
La familia de Jay Slater no baja los brazos y continúa con su búsqueda, aunque trascendió que agentes de la policía aseguraron que era “muy probable” que el mozuelo no fuera encontrado con vida dadas las circunstancias a 15 días de haber desaparecido.
Slater viajó a Tenerife en compañía de dos amigos para pasar las vacaciones y acudir a un festival de música en el sur de la isla, en la madrugada del 16 de junio conoció a otros dos hombres y se marchó con ellos hasta una vivienda ubicada en el Parque Rural de Teno.
Sus amigos denunciaron su desaparición y en el último contacto que tuvieron con él antes de que se le acabara la batería del celular, les comentó que había perdido el transporte, tenía sed y trataba de volver andando a su apartamento.
