La Liga de Fútbol Americano (NFL) busca empresas que estén dispuestas a desembolsar hasta 50 millones de dólares por el espacio publicitario en el show de medio tiempo del Super Bowl a raíz de la finalización del contrato con la multinacional Pepsi.
La marca de refrescos era la propietaria principal de los derechos de comercialización del espectáculo desde 2012, pero su contrato venció este año.